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miércoles, 7 de marzo de 2012

Game over Público

El pasado 3 de enero, Mediapubli, la empresa editora del diario Público, presentaba concurso voluntario de acreedores. La sociedad alegaba como causas:
  • La intensificación de la crisis publicitaria
  • La profunda transformación que está sufriendo el sector de la prensa escrita 
  • Las dificultades para acceder a nueva financiación
Esta situación lleva a replantearse varias cuestiones como son las vías de financiación de los periódicos, la calidad de los productos informativos vigentes en el mercado así como las supuestas demandas que algunas veces se pretenden cubrir. Me detendré en esta última. 
Los hechos han demostrado que la edición impresa de Público no era sostenible empresarialmente. Si tenemos en cuenta que  las principales vías de financiación (aunque no las únicas) de la prensa son las venta al número y los anuncios cabría esperar que si hubiese una demanda real de dicho medio, los ingresos hubiesen sostenido la publicación. 

Sin entrar a valorar las circunstancias en las que que se dio el nacimiento del diario de Jaume Roures, he aquí una de las razones por las que el mercado ha echado a Público: la necesidad que se pensaba que se iba a cubrir no existía. O por lo menos no había la demanda suficiente para sostenerla.

Elevando el foco más allá del caso de Público, cabe reflexionar sobre una cuestión: no hay contenidos sin audiencia. Los productos informativos se hacen para que alguien los consuma.
Por ello hay que tener en cuenta aspectos que van más allá de un posible nicho de mercado: ¿Hay una demanda real? ¿Es sostenible el producto? ¿Cuáles son las características de la audiencia? ¿Cuál es la competencia a la que hay que enfrentarse? Estas y algunas cuestiones más son las que hay que plantearse a la hora de emprender un proyecto de estas características.

Por lo menos, los lectores de Público pueden tener seguro, al menos de momento, el acceso a la información en su web. Sin embargo, en el caso de que se diesen las circunstancias, ¿estarían estos lectores dispuestos a pagar por la información que les interesa?